Después de haber agotado las entradas para dos shows en El Lunario y de presentarse en el Vive Latino hace unos meses. El cantante español Carlos Sadness regresó a tierras aztecas para ofrecer un concierto íntimo con sus más fieles seguidores de la CDMX.

El pasado primero de diciembre fue el día elegido por Carlos Sadness para llegar con Ciencias Celestes al famoso recinto de colonia Condesa.

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Pehuenche para calentar motores

Como se acostumbra a hacerlo en algunos conciertos, este evento contó con la participación de un músico para calentar motores. Pehuenche fue el encargado de animar la noche con sus canciones.

A pesar de una corta presentación, el músico logró conectar de una manera aceptable con el público. Dentro de su setlist para esta noche estaba su más reciente sencillo ‘Sin tu querer‘, el cual ya está disponible en plataformas digitales.

Carlos Sadness en su regreso a México

La presentación de Pehuenche, sin duda dejó listo el escenario para Sadness. Finalmente, después de un corto intervalo de tiempo, entre gritos ensordecedores de todos los fans, salió el músico estelar al escenario.

Durante su presentación sonaron canciones como: ‘Hoy es el día’, ‘Au revoir’, ‘Minuto en la lluvia’ y ‘Fue tan importante’.

En este show se notó a mares el cariño del público mexicano hacia Carlos y su música. Cada uno de los asistentes coreó hasta el final todas las canciones.

Sadness lo volvió a hacer, logró un lleno total ahora en El Plaza Condesa. Para esta presentación Melissa Robles de la banda Matisse lo acompañó. ‘Días Impares’ y ‘Amor Papaya’ fueron las canciones que cantaron a dueto en un momento que se tornó romántico.

Recordemos un poco de la historia de Carlos. El cantante dio sus primeros pasos en la música en los caminos del rap. Durante este show, Sadness retomo un poco de eso.

En cada tema los fanáticos del español enloquecieron. Entre freestyle combinado con los instrumentales, Carlos agradeció al público por asistir y por no abrirse al miedo después del sismo del 19 de Septiembre.

Agradeció también por hacer que él perdiera el miedo y no cancelar el concierto. Después de casi dos horas de espectáculo, las fans no lo querían dejar ir.

Carlos cerró la noche con mucho amor para su gente en México. La euforia fue tanta que aún terminado el concierto la gente no paro de corear su nombre. Los asistentes dejaron de gritar hasta que se encendieron las luces como señal de que termino el evento.

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